Un día puedes estar comiendo una hamburguesa de carne en un local de comida rápida, y al día siguiente ordenando una hamburguesa vegetariana en un restaurante naturista. Aunque no es el más común de los escenarios, hay gente que con sólo ver un vídeo, escuchar una charla, leer un artículo o un folleto acerca de cuánto sufren los animales en los mataderos y en las granjas factoría, deciden hacerse vegetarianos.

Esta clase de personas se motivan a cambiar rápidamente y prefieren hacer los grandes cambios lo más rápido posible en lugar de alargarlos.

Los beneficios de un cambio rápido

  • Los beneficios son más rápidos. Donde se notan más rápido los cambios hechos “de un día para otro”, es en la salud. Por ejemplo, una persona con sobrepeso empieza a perder kilos notoriamente, o los niveles de glucosa de un diabético bajan en seguida.
  • Te sientes satisfecho por haber hecho lo que querías. No tienes pretextos para alcanzar tus metas.

Este tipo de enfoque funciona mejor para personas que

  • Con sólo un poco de información sobre nutrición o haber hablado con un vegetariano, es suficiente para intentar el cambio.
  • Tienen un medio favorable. Amigos o parientes ya son vegetarianos, o viven en un país o ciudad donde no es complicado conseguir alimentos nutritivos. Han leído de nutrición o les gusta cocinar.
  • No tienen demasiadas complicaciones. Es más fácil hacer cambios “de un día para otro”, si no tienes que ocuparte de un recién nacido, o adaptarte a un nuevo trabajo, una jornada laboral exhaustiva.

Para algunas personas, no hay alternativa: una vez han visto un vídeo de cómo matan a los animales, no pueden volver a ver una de carne como comida. Para ellas, la decisión está tomada y no hay tiempo que perder en leer o averiguar más. Simplemente, no volverán a comer animales.