Visto lo visto... el mundo no me horroriza nada. Esta es la sociedad en la cual vivo: “Con lo rica que está la carne... cuantas tonterías tienes en la cabeza”, “Ya me como yo la carne tuya y la mía”, “No creas que así vas a salvar el mundo”, “Eres un radical!”... y así miles y miles de frases, pero después de todo, la gran mayoría de estas personas, tienen perro o gato y son animales también. O algunas de estas personas hacen obras de caridad: “al mes pago 20€ porque tengo un niño apadrinado al cual explotan trabajando” (pues entonces no vistas con ropa como de marca que provienen de esos países); y más ejemplos que están llenos de Hipocresía totalmente.

El mundo seguirá igual de ignorante si la gente sigue comiendo carne o pescado, y nadie piensa en esto cuando entra en un supermercado (por ejemplo): “Entras con tus amigos a comprar patatas y algo de beber. Andas contento porque vas a pasarlo bien esa noche, y cuando pasas por el enorme apartado carnicero, nadie piensa de donde viene eso ni lo que es, y la gente lo compra.” Pero nadie se da cuenta ¿de dónde viene toda esa carne? No nos gustaría ser esos animales, pero tampoco pensamos en ello porque la carne está muy rica y que más da... ya está muerto. Ellos no han hecho daño a nadie para que les hayan hecho eso, en cambio, hay muchos políticos que se merec...

Como nacido en España que soy, tengo suficientes conocimientos sobre la “Fiesta Nacional”. Maravillosa fiesta donde el valiente del torero se juega la vida... (tenía ganas de poner algún sarcasmo). De bien pequeñito fui a una corrida de toros en Navas de San Juan, de donde salió el maestro Enrique Ponce (otro sarcasmo, ja!). Pues en la habitación nuestra teníamos fotos suyas y le apoyábamos porque él era del pueblo y famoso, pero van pasando los años y acabas pensando lo que hace con la espada, banderillas, el rejoneo, etc. Y a los 12 años de edad mi cerebro estaba convencido de que era Antitaurino. Aún así, solo he comido carne toda mi vida, ya que me gustaba mucho, y sabía que esos cerdos sufrían antes de llegar al supermercado donde compraba la carne, pero como no se ve por televisión y menos en persona... pues seguí engullendo carne sin problema alguno en mí.

Después de una noche de fiesta mayor en de mi barrio, me levanté un mediodía y me puse a hacer en la cocina cuatro trozos de lomo. Cuando me dirigí hacia el comedor me encontré a mi hermana que ya llevaba un año de vegetariana, se puso a ver el DVD de Paul McCartney & Friends de PETA que le había regalado, y mientras estaba comiendo el segundo trozo de lomo, “mi consciencia limpia” empezó a recibir mensajes del televisor que tenía delante mío. ¡Qué horror! ¡Aquello no podía suceder, era algo peor que una corrida de toros y eso no podía tolerarlo! Esos cerdos que estaban saliendo en mi televisor no tenían culpa alguna de que les hiciesen aquello;  reaccioné de inmediato sin darme cuenta y aparté mi plato lleno de aquella sangre, la misma que estaba viendo en TV. Desde entonces no he comido más carne, y puede ser que esté buena, pero habiendo otras cosas más buenas, más sanas, y (lo más importante para mí) sin sangre ¿por qué debía seguir comiendo carne? Nunca la he echado de menos y eso que solo comía carne y carne, a cualquier hora del día. Yo siempre pensé que una dieta vegetariana era una dieta muy sana, pero tal y como me hice vegetariano la gente lo único que hacía era criticarme, menos un gran amigo mío llamado Aarón que dejó de comer carne durante unos meses al ver aquellas imágenes. Con muchas críticas de la gente, he seguido para adelante con mi lucha por la Liberación Animal. Dejé mi trabajo en la obra por las críticas de los trabajadores, me han insultado siete personas a la vez diciendo que son ecologistas, y después de todo la gente se sigue metiendo contigo con pequeñas bromas que sobran, pero lo que a mí me sucede no es nada comparado a los animales, así que seguiré aguantando y con el apoyo de mi gente, seguiré luchando.

Toni Rodríguez Segura